Nabucodonosor, segundo rey de Babilonia, reinó de 605 a 562 A.C. Durante su reinado conquistó a Judá y llevó cautivos a los judíos.
Construyó calles de baldosas, grandes muros, fosos, presas hidráulicas, templos de oro y cedro, y bellas estatuas de bronce.
La más rara y hermosa creación arquitectónica de su reinado fueron los famosos jardines colgantes de Babilonia. Nabucodonosor fue el rey que echó en el horno ardiente a Sadrac, Mesac y Abed-nego por no adorar su ídolo.
Cuando el fuego no los dañó, Nabucodonosor los honró a ellos y a su Dios (Daniel 3:28-30).
Tuvo extraños sueños que no podía comprender, y llamó a Daniel para que los interpretara.