Noé (hebreo: נֹחַ Noaẖ, árabe: نُوح Nūḥ, griego: Νώε Nóe, latín: Noe) fue, en la Biblia, junto con su esposa, sus tres hijos Sem, Cam y Jafet y sus esposas, uno de los ocho supervivientes del gran diluvio creado por Dios para destruir a los descendientes violentos de Adán y Eva, de acuerdo con el Tanaj y la Biblia. 

Cuando tenía 600 años, Dios le dio instrucciones para que construyera un arca grande hecha de madera de gofer que sirvió para albergar a él y a su familia, así como para todas las especies de animales, durante el diluvio. 

También es considerado por las religiones abrahámicas como el padre de la humanidad a través de los descendientes de sus tres hijos.

Según las escrituras, fue el décimo y último de los superlongevos patriarcas antediluvianos: Noé murió 350 años después del Diluvio, a la edad de 950 años. Esto lo convierte en el segundo hombre más longevo de toda la Biblia, tras Matusalén, que vivió supuestamente 969 años, (el Pentateuco samaritano le atribuye 720) superando incluso a Adán (930 años). En proporción a su larga vida, engendró a sus tres hijos cuando tenía 500 años. 

Luego de Noé la edad de muerte se precipita drásticamente a "solo" 120 años para Moisés.